jueves, 11 de diciembre de 2014

LA ADIA PARTICIPA EN VISTAS PÚBLICAS PROYECTO DE LEY NACIONAL DE SEMILLAS


El pasado miércoles 10 de noviembre del 2014 la Asociación Dominicana de Ingenieros Agrónomos (ADIA) participó en la celebraron de las Vistas Públicas para conocer el Proyecto de Ley Nacional de Semillas, a las 9:00 a.m., en el Salón Hugo Tolentino Dipp de la Cámara de Diputados, por invitación del presidente de la Comisión Permanente de Agricultura, el ingeniero agrónomo David Herrera Díaz.
 
Foto 1. Al finalizar las vistas públicas, el presidente de ADIA (izquierda) sostuvo un breve conversatorio con el ingeniero agrónomo David Herrera Díaz (centro), Presidente de la Comisión Permanente de Agricultura de la Cámara de Diputados de la República Dominicana. A la derecha, el ingeniero agrónomo Félix Cirilo Reyes Herrera, quien fuera Encargado de la División de Fitromejoramiento del Centro de Investigaciones Arroceras, Juma - Bonao, provincia Monseñor Nouel (hoy estación del IDIAF).
Foto 2: junto al ex-compañero de trabajo en el CEDIA, Juma-Bonao, el ingeniero agrónomo Marino Hernández Alberto, Diputado y miembro de la Comisión Permanente de Agricultura de la Cámara de Diputados de la República Dolminicana

El presidente de la ADIA, César Matos, centró sus observaciones al proyecto de Ley, sobre la necesidad de observar y preservar el derecho que tienen los pequeños y medianos agricultores a conservar su propia semilla tradicional, sin que ello le impida el acceso al crédito que facilitan las instituciones del Estado (como el Banco Agrícola y el FEDA). Llamó la atención de que el presente proyecto de Ley tal como se plantea busca poner en manos privadas los derechos de propiedad sobre los genomas de las principales variedades, razas y cultivares del país. Y que en el caso del arroz, si hacemos un análisis los derechos históricos y de origen, tendríamos que pagarle las licencias correspondientes a la China y a la India, porque son los centros de origen de las principales subespecies cultivables de arroz.

César Matos, reivindicó la obligación del Estado de proteger a los pequeños productores agropecuarios para que sus derechos no les sean conculcados a través de controles rígidos que establece la Ley, que obligan a los productores a comprar semilla exclusiva certificada por determinadas compañías semilleras. Esto constituye una pretensión de alta peligrosidad que vulnera el principio de la libertad de empresa y el libre mercado.  Subrayó que esta Ley está diseñada para proteger el mercado, no para proteger la gente. El presidente de la ADIA definió el neoliberalismo como la etapa más peligrosa del capitalismo, porque pretende entregar todos los controles y roles de gobierno a la gran empresa privada y anular completamente las libertades y derechos universalmente reconocidos de las naciones, y especialmente de los trabajadores; privilegia el desarrollo del capital antes que el desarrollo humano y la construcción de una sociedad más justa y equitativa.

Puntualmente, el presidente de la ADIA, ingeniero agrónomo César Matos, solicitó cambiar  en el Considerando Quinto el término “controlar” por “regular”, para no afectar las libertades individuales y de libre empresa. Lo mismo sugirió para el Artículo 1 que define el Objeto de la Ley.

César Matos, en nombre de la ADIA, planteó revisar el artículo 13, de modo que los pequeños y medianos productores tengan derecho a preservar su propia semilla aunque no la registre (eso es libertad individual) y no se le niegue por ello el acceso al financiamiento de su cosecha. Propuso revisar el artículo 56 para que en el Consejo Directivo de ONASE (Oficina Nacional de Semilla) haya representantes de las organizaciones de trabajadores rurales, así como de organizaciones campesinas   y de profesionales agropecuarios y ambientales independientes.

La ADIA pidió que en el Capítulo V de la Ley, así como se crea un Fondo Semillero para proteger a los empresarios productores de semilla, se cree también un Fondo Solidario de semillas certificadas para garantizar la sostenibilidad económica de la empresa familiar campesina, que es la que provee la alimentación de todo el pueblo dominicano, ya que en República Dominicana más del 70% de los productores son pequeños, y son los que el Estado Dominicano está llamado a proteger con un fondo de contingencia. Recordó que el Estado ha sido el principal gestor de las principales variedades del país, las cuales ahora se pretenden privatizar.


Por último, el presidente de ADIA llamó a corregir un error de forma contenido en el Proyecto de Ley Nacional de Semillas en la Sección III “De la Certificación de Semillas”, Artículo 25, Párrafo I, Numeral 1, que debería decir que la semilla de origen “Para la Semilla Fundación es la Genética  o Prebásica”.

No hay comentarios:

Publicar un comentario