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| Por: José Moreta, ingeniero agrónomo |
Esperamos que esta vez se concretice el anuncio que acaban de hacer la
Oficina Nacional de Estadísticos (ONE),
el Ministerio de Agricultura y la Organización
de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), de que se llevará a cabo en los
próximos meses el VIII Censo Nacional
Agropecuario en la República Dominicana.
Se recuerda que en el año 2006
fue la última ocasión en que la ONE y la
SEA de entonces, firmaron un acuerdo interinstitucional para llevar a cabo el
VIII Censo, cuando se comprometieron a tener los primeros resultados a inicios del año 2007 y, a la fecha, han transcurrido 7 años sin que el acuerdo se cumpliera. Como
sabemos el VII y último Censo Nacional Agropecuario se realizó en 1981 hace ya
32 años y por lo visto ya se han cumplido más de tres ciclos de censos, pues
debe llevarse a cabo cada 10
años, según lo establecido por las Naciones Unidas.
Esa situación
ha contribuido por igual a
agravar el desfase del sistema de Información agropecuaria en la
República Dominicana, que en la
actualidad no cuenta con datos del
sector agropecuario actualizados y con buen
nivel de confiabilidad para la permanente tarea de planificación y toma de decisiones de políticas en el sector.
Gracias a que 17 años después de realizado el últimos censo , la SEA de
entonces, con la cooperación de FAO,
llevó a cabo en el 1998 el
“Registro Nacional de Productores Agropecuarios”, que si bien no fue reconocido
como Censo por la ONE, palió en alguna medida la falta de información y datos
para la planificación.
Desde hace bastante tiempo la
información agropecuaria de nuestro país se encuentra, en gran medida, dispersa
en las oficinas que la generan. Es por demás, desactualizada, fraccionada y
suministrada por varias fuentes del
sector que la sirven con poca consistencia y confiabilidad, lo que obliga a
tomar con sumo cuidado el uso de los datos en las permanentes tareas de
formulación de planes, programas y proyectos en el sector agropecuario público y
privado.
Es obvio pues, que la información del
Censo Nacional Agropecuario servida con la periodicidad y oportunidad que
establece la Organización de las Naciones Unidas y en primer lugar la existencia de un Sistema de información Agropecuaria
que se alimente con los
datos periódicos del propio censo, se constituyen en eslabones que sin
duda alguna contribuyen a mejorar la
competitividad del sector, a garantizar
la transparencia de los mercados y a tomar decisiones más racionales y con
mayor certidumbre en los ámbitos público y privado.
Es tiempo ya de que se terminen
las posposiciones de éste compromiso de tanta importancia nacional. Ejecutemos
pues el censo cuanto antes!!!
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